La reciente propuesta de reforma tributaria en Colombia podría traer consigo un incremento en el precio de la gasolina, según advierten expertos del sector energético. Este ajuste estaría relacionado con la eliminación o reducción de algunos subsidios y la implementación de nuevos impuestos que afectarían directamente el costo del combustible.
Uno de los puntos clave de la reforma es el ajuste en el Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC), un mecanismo que ha permitido contener las fluctuaciones internacionales en los precios del petróleo y evitar aumentos abruptos en el país. Con la posible reducción de estos subsidios, los colombianos podrían enfrentar un aumento en el costo de la gasolina.
Además, la reforma plantea la introducción de impuestos relacionados con el carbono y la sostenibilidad ambiental, lo que también incidiría en el precio final del combustible. Estos nuevos tributos tienen como objetivo incentivar la transición hacia energías más limpias, pero su aplicación podría generar una carga adicional para los consumidores.
El aumento en el precio de la gasolina no solo afectaría a los conductores, sino también a otros sectores de la economía, ya que el transporte de mercancías y productos básicos vería incrementados sus costos operativos. Esto podría traducirse en un aumento general de los precios en varios productos y servicios.