El ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, ha anunciado que el precio del diésel podría aumentar en 2025, argumentando que es insostenible mantenerlo congelado. Según Bonilla, la medida es necesaria para equilibrar las finanzas del país y reducir el déficit del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC).
El ministro explicó que el Gobierno ha intentado mantener los precios del diésel estables para no afectar el costo de vida, especialmente en el transporte y los bienes de primera necesidad. Sin embargo, advirtió que esta política no puede continuar indefinidamente, ya que representa un alto costo fiscal.
El anuncio ha generado preocupación entre los transportadores y otros sectores que dependen del diésel, quienes temen que un aumento en su precio impacte negativamente en la economía, encareciendo los productos y servicios.
Aunque el Gobierno no ha dado detalles específicos sobre el porcentaje de aumento, se espera que en los próximos meses se establezca un cronograma para ajustar gradualmente los precios, con el objetivo de mitigar los efectos en la economía y la inflación.
Este posible incremento en el precio del diésel se suma a los desafíos que enfrenta el sector transporte, que ya ha expresado su inconformidad con las políticas actuales y ha llevado a cabo varias protestas a lo largo del país.